De la fuerza del estado, Atizapense

Aún a sabiendas de las deplorables condiciones en las que se encuentra el país y aún con la certeza de que México, desde hace varios años es controlado desmedidamente por el crimen organizado –de cualquier índole, desde el empresarial hasta el ilícito-, Felipe Calderón se aventó la puntada de asegurar que no existe una fuerza superior a la del estado, háganme ustedes el condenadérrimo favor, ahora resulta que por tan solo haberlo dicho, los mexicanos vamos a creer que nuestro estado y sus burocráticas huestes administrativas son sólidos, capaces, incorruptibles, transparentes, crecientes y hasta inmaculados ¿no?, pero aún así, pudiendo los habitantes de este inundado, repleto de baches, saqueado, ensangrentado y pésimamente mal manejado país darse cuenta de la verdad predominante –esa que día con día nos muestra que de no ser por las fuertes lluvias, los sacudidores terremotos, los grandes y famosos narcotraficantes, las empresas evasoras de impuestos, los políticos mentirosos y corruptos y el propio pueblo desmoralizado y desunido, efectivamente no habría fuerza superior a la del tan fallido estado del que TODOS estamos hablando actualmente- continúan los esfuerzos de nuestro presidente por mostrarse cabal y valiente en cada momento y lugar y eso mis queridos leedores es de aplaudirse, ¿a poco no?

Y así es como llegamos a la parte central de esta entrega donde observo que mientras muchos conciudadanos unen dineros y esfuerzos por ayudar a quienes las fuertes lluvias han afectado y desafortunadamente seguirán afectando, nuestro sólido y sobre todo coherente estado continúa firme en su postura de hacer del bicentenario de la independencia y del centenario de la revolución una costosísima muestra de entereza nacional, misma que hasta el momento lleva sumados casi tres mil millones de pesos con los que perfectamente podría darse solución a algunos de los problemas que actualmente afectan al país, ya no digamos adquirir armamento para seguir jugando a los soldaditos por todo el territorio nacional persiguiendo capos fantasmas y evidencias sembradas cochambrosamente, ya no digamos invertir de manera adecuada en pos de la explotación productiva de nuestros bastos depósitos de petróleo que podrían colocarnos en una excelente posición mundial, ya no digamos dejarse de hacer locos y mejorar de tajo la educación y la salud nacionales, ya no digamos siquiera invertir estos millones en busca de la generación de unos cuantos empleos más, ya no digamos siquiera que esa lana sirva para asentar las bases de un sistema inteligente -¿será mucho pedir?- que consiga evitar que millones de connacionales se brinquen las trancas de nuestro racista y grosero vecino del norte y mucho menos hablemos de ahorrarla para cuando la mancha de petróleo que empuerca el Golfo llegue a costas mexicanas y que al menos se salven unos cuantos peces y otros tantos pajaritos pero creo que si podemos decir que tantos millones de pesos perfectamente pueden comprar reservas alimenticias para todos aquellos que aún siguen con el agua hasta el cuello ¿o no?

El caso es que un sinfín de periodistas y personajes de todas las índoles han cuestionado sobre este tema –y varios más- a nuestro máximo representante y absolutamente todos hemos recibido la misma respuesta, puro silencio y uno que otro comentario fuera de lugar, lo único que nos queda es hacerle saber tanto a el como a su séquito de iluminados –la burla va por mi cuenta y por delante de la i- que definitivamente los mexicanos comunes y corrientes no tenemos absolutamente nada que celebrar haciendo caso omiso a sus convocatorias festejosas y espectáculos chaquetos para que por lo menos no quede justificado el grosero e insultante desperdicio de recursos del que nos han hecho –nuevamente y para no perder la mondriga costumbre- víctimas.

Si hay una fuerza superior al estado lectores, el pueblo –aunque no les convenga decírnoslo-, pero ojo, no estoy llamándolos a un levantamiento armado y mucho menos a un hervidero de mentadas e improperios, simplemente me encantaría saber que por fin hemos comenzado a despertar de ese letargo que nos ha caracterizado por años y que por fin hemos conseguido demostrarnos a nosotros mismos que podemos exigir que lo que tanto hemos trabajado y lo que tanto hemos soportado sea correctamente encausado.

¿o que a poco eres de esos que aplaude por todo solo porque te gusta el reventón?

Antonio Andrade

Estimado Juan Pueblo, me agradaría mucho que publicaras las siguientes reflexiones, soy un asiduo seguidor de tu blogg, gracias:


Transcurrieron 4,620 días antes que el PRI ganara una elección local en Atizapán de Zaragoza, el 5 de julio de 2009 con 417 votos de diferencia del PAN, que sumados a los 12,984 votos de candidaturas comunes le daban el triunfo con el 44.6% de la votación.

El inicio de la administración Priista, consistió en nombrar a los directores municipales, tarea fácil para una rustica bancada de regidores, que alzando la mano concedían la imposición echa por su jefe supremo.

La administración 2009-2012, abrió con directores de todo tipo; la mayoría alejados por mas de 12 años y que formaron parte de la administración que en 1996 entrego el poder al PAN; otros, los menos, con gran trayectoria en su partido pero sin experiencia en la administración publica, otros, añejos adversarios del PRI, afines al panismo local; unos mas, distinguidos ‘cuates’ del presidente conocidos por la prepotencia, humillación, ofensas, insolencia y arrogancia con la que actúan, algunos directores son familiares de altos políticos del gobierno del estado o del propio presidente, y algunos con currícula por demás ingeniosa, en no mas de tres renglones, sin formación académica o política, incluso echados del anterior gobierno por bribones.

Ellos conforman la administración de Atizapán, que al paso del tiempo hemos visto endeble, con un presidente invisible para su pueblo, un presidente imposible de hallar, esfumado, desorientado y despistado de los conflictos sociales, sin proyecto de gobierno, con directores complicando el entorno, incapaces de dirigir sus dependencias, carentes de innovación y criterio; sin vocación de servicio.

Además con la herencia de numerosos empleados que deben su cargo a otros, no al PRI, sin obligación de colaborar con el actual gobierno; integrantes del PAN, que no renunciaran a sus ideales, añorando el regreso de su partido, ocupados en ello, pues ya conocen las debilidades del gobierno actual, apostados en sitios estratégicos, solo falta esperar para que el robo de información sea bien utilizada por el PAN, el enemigo lo tienen en casa.

Mientras tanto, el auténtico priista que por décadas se mantuvo fiel a sus convicciones, que lucho y represento por años a su partido, que desatendió su hogar por consagrarse al PRI, hoy se encuentra en el olvido, abatido, rendido, humillado, desprotegido, traicionado, desatendido, consternado y sin esperanza, porque reconquisto Atizapán y no le agradecieron, hoy favorecen a otros, no a el; y continuara esperando la invitación de su amigo, que seguro jamás llegara, o tal ves si, solo para pedirle ganar la próxima elección.

Por tu atención muchas Gracias

ATIZAPENSE

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Hasta la próxima….

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